La zona arqueológica se localiza entre tres comunidades indígenas: Ek’ Balam Pueblo (a 1 km), Santa Rita (a 3 km) y Hunukú (a 8 km). La zona arqueológica se ha convertido en el corazón de esta región, ya que muchas personas locales han transformado su forma de vida orientada al turismo. Aunque cada día crece el número de visitantes a la zona arqueológica, los mayas de las comunidades cercanas siguen preservando sus tradiciones, cultura y formas de vida.
Las organizaciones indígenas representan una forma de resistencia y de preservación de las costumbres familiares y comunitarias en esta región. A continuación presentamos datos sobre las tres comunidades mayas localizadas alrededor de la zona arqueológica.
Lugar
Ek'Balam en la actualidad
Los mayas modernos de Ek’ Balam
Población de Ek’ Balam
De acuerdo con el censo 2020 del INEGI, la población total era de 374 habitantes en 76 viviendas con una mayoría del 96% de población indígena. Se contabilizaron 311 personas de 3 años o más que hablan alguna lengua indígena, en este caso maya, de las cuales el 6% solo habla dicha lengua y el 94% restante hablan maya y español. Se registró que el 12% de la población es analfabeta, el 6% no cursó ningún nivel escolar mientras que el 53% de personas mayores a 12 años son activas laboralmente.
Según la CONEVAL, Ek’ Balam se encuentra en el nivel medio de rezago social, el cual se mide por indicadores de rezago educativo, acceso a servicios de salud, calidad y espacios de la vivienda y servicios básicos.
Respecto a la vivienda se observan dos tipos, las tradicionales mayas de planta ovalada con muros de bajareque y techos de guano, y las otras de materiales modernos como tabique, block y cemento (PNUD, SEMARNAT, 2018); en algunos casos ambas construcciones conviven en un mismo terreno y los espacios se destinan a diferentes actividades. Más del 90% de las viviendas cuentan con instalaciones básicas de electricidad, por el contrario, no existe drenaje ni sistema de recolección de basura (INEGI, 2020).
Según la CONEVAL, Ek’ Balam se encuentra en el nivel medio de rezago social, el cual se mide por indicadores de rezago educativo, acceso a servicios de salud, calidad y espacios de la vivienda y servicios básicos.
Respecto a la vivienda se observan dos tipos, las tradicionales mayas de planta ovalada con muros de bajareque y techos de guano, y las otras de materiales modernos como tabique, block y cemento (PNUD, SEMARNAT, 2018); en algunos casos ambas construcciones conviven en un mismo terreno y los espacios se destinan a diferentes actividades. Más del 90% de las viviendas cuentan con instalaciones básicas de electricidad, por el contrario, no existe drenaje ni sistema de recolección de basura (INEGI, 2020).
Territorio de Ek’ Balam
La localidad de Ek’ Balam tiene un perímetro aproximado de 2.5km lineales y un área aproximada de .28km2 según datos del INEGI, conformado por espacios habitacionales y públicos, alrededor se encuentran tierras de cultivo pertenecientes a los ejidatarios de X-Kumil (nombre del ejido al que pertenece tanto la localidad de Ek’ Balam como parte del sitio arqueológico), el cual comenzó su formación desde 1935 y 1936 cuando se realizó la petición al Gobernador del Estado de una dotación ejidal para los campesinos arrendatarios de la comunidad, recibiendo la resolución hasta el año de 1940 en donde se les dotó de 767 hectáreas de agostadero montuoso1, sin embargo, esta solicitud se confirmó por el Presidente de la República Manuel Ávila Camacho hasta 1942 para recibir los certificados de derecho en 1950 (PNUD, SEMARNAT, 2018).
Crecimiento Poblacional de Ek’ Balam
Revisando los censos y conteos poblacionales del INEGI desde 1990 al 2020, se aprecia un crecimiento regular en la población con una media de 7.4 personas por año durante los últimos 30 años, sin embargo, cabe señalar que de 1990 al 2000 eran menos personas y el crecimiento poblacional fue el mismo que del 2010 al 2020 con prácticamente el doble de población. En perspectiva, es notable un crecimiento de poblacional más lento a medida que pasa el tiempo. (INEGI, 2020).
Los ejidatarios de X-Kumil vivieron en el poblado con el mismo nombre, localizado en el ejido de Temozón hasta que comenzaron conflictos organizacionales y de trabajo a mediados de la década de los 50, pero no fue hasta 1973 que las primeras 12 familias se trasladaron a lo que hoy es el poblado de Ek’ Balam realizando los trabajos de acondicionamiento del terreno y pozo de agua para establecer la comunidad, con 23 hectáreas para asentamiento humano, 24 para uso común, 715 como parcelas y de las cuales hay 44 hectáreas que comparte con el sitio arqueológico (PNUD, SEMARNAT, 2018).
Los ejidatarios de X-Kumil vivieron en el poblado con el mismo nombre, localizado en el ejido de Temozón hasta que comenzaron conflictos organizacionales y de trabajo a mediados de la década de los 50, pero no fue hasta 1973 que las primeras 12 familias se trasladaron a lo que hoy es el poblado de Ek’ Balam realizando los trabajos de acondicionamiento del terreno y pozo de agua para establecer la comunidad, con 23 hectáreas para asentamiento humano, 24 para uso común, 715 como parcelas y de las cuales hay 44 hectáreas que comparte con el sitio arqueológico (PNUD, SEMARNAT, 2018).
Población de Hunukú
La localidad de Hunukú es la segunda más poblada del municipio de Temozón con un total de 3549 ciudadanos de acuerdo con el censo del 2020. Se contabilizaron 855 viviendas habitadas con una mayoría del 99.4% de población indígena, el 86% de personas de 3 años en adelante hablan lengua maya y de estos el 94% también habla español.
De acuerdo con la CONEVAL, Hunukú se encuentra en el nivel medio de rezago social, al igual que Ek’ Balam comparte características respecto a la vivienda. Se observan construcciones tradicionales mayas con postes de madera, muros de bajareque y techos de guano, aunque en este caso predominan las casas de materiales modernos como tabique, block y cemento. Más del 90% de las viviendas cuentan con energía eléctrica, el 74% tienen excusado y sanitario, y el 65% disponen de drenaje (INEGI, 2020).
En Hunukú el 9% de la población es analfabeta, el 5% no cursó ningún grado escolar, el 14% tiene la primaria trunca, el 28% completó la secundaria y solo el 7% continuó con educación media y superior. En la localidad hay un plantel educativo por cada grado de educación básica, una escuela preescolar, una primaria, telesecundaria y un telebachillerato. Al igual que en las comunidades aledañas, quienes desean acudir a otra escuela y/o continuar con sus estudios deben trasladarse a Temozón, Valladolid o Tizimín.
El 87% de la población declaró tener acceso a servicios de salud en instituciones públicas o privadas. En Hunukú se encuentra una Unidad Médica Rural del IMSS con primer nivel de atención, si se requiere de otro tipo de servicios la gente debe trasladarse a Temozón o Valladolid.
Respecto a creencias religiosas, en el censo del 2020 se contabilizó que el 77.4% de la población es católica, mientras que el 14% forma parte de un grupo religioso protestante o cristiano evangélico y apenas el 7.6% no se adscribe con alguna religión. A pesar de que la religión católica sigue siendo la predominante en el territorio mexicano, desde hace ya varios años en la península y sobre todo en las comunidades rurales, se ha visto un crecimiento importante de practicantes de religiones protestantes, evangélicas y no evangélicas, en Yucatán representan casi el 16% de la población total creyente (INEGI, 2023).
De acuerdo con la CONEVAL, Hunukú se encuentra en el nivel medio de rezago social, al igual que Ek’ Balam comparte características respecto a la vivienda. Se observan construcciones tradicionales mayas con postes de madera, muros de bajareque y techos de guano, aunque en este caso predominan las casas de materiales modernos como tabique, block y cemento. Más del 90% de las viviendas cuentan con energía eléctrica, el 74% tienen excusado y sanitario, y el 65% disponen de drenaje (INEGI, 2020).
En Hunukú el 9% de la población es analfabeta, el 5% no cursó ningún grado escolar, el 14% tiene la primaria trunca, el 28% completó la secundaria y solo el 7% continuó con educación media y superior. En la localidad hay un plantel educativo por cada grado de educación básica, una escuela preescolar, una primaria, telesecundaria y un telebachillerato. Al igual que en las comunidades aledañas, quienes desean acudir a otra escuela y/o continuar con sus estudios deben trasladarse a Temozón, Valladolid o Tizimín.
El 87% de la población declaró tener acceso a servicios de salud en instituciones públicas o privadas. En Hunukú se encuentra una Unidad Médica Rural del IMSS con primer nivel de atención, si se requiere de otro tipo de servicios la gente debe trasladarse a Temozón o Valladolid.
Respecto a creencias religiosas, en el censo del 2020 se contabilizó que el 77.4% de la población es católica, mientras que el 14% forma parte de un grupo religioso protestante o cristiano evangélico y apenas el 7.6% no se adscribe con alguna religión. A pesar de que la religión católica sigue siendo la predominante en el territorio mexicano, desde hace ya varios años en la península y sobre todo en las comunidades rurales, se ha visto un crecimiento importante de practicantes de religiones protestantes, evangélicas y no evangélicas, en Yucatán representan casi el 16% de la población total creyente (INEGI, 2023).
Crecimiento poblacional de Hunukú
Al analizar los datos del INEGI se observó que de 1990 al 2000 hubo un crecimiento poblacional de 574 personas, similar al periodo del 2010 al 2020 donde hubo un crecimiento de 578 personas, sin embargo, del 2000 al 2010, el demográfico aumentó en 733 personas, dando un promedio de 628 cada 10 años, un fenómeno parecido a lo que se observó en Ek’ Balam de crecimiento constante a excepción de ese pico en la década del 2000, en conclusión, la tendencia sigue siendo un crecimiento más lento con el paso del tiempo.
Territorio de Hunukú
La localidad de Hunukú se localiza a 13km al noreste de Temozón y a 33km aproximadamente desde Valladolid, en las coordenadas geográficas 88°05’26.074” W y 20°51’06.641” N, con una altitud de 24 metros sobre el nivel del mar. Tiene una extensión territorial de 6.4km perimetrales y 1.18km2 donde se encuentran espacios habitacionales, públicos, establecimientos comerciales y escuelas entre otros. El acceso principal a la comunidad es a través de la carretera desde Temozón utilizando la vía Valladolid-Tizimín y pasando por Santa Rita; a partir de donde se puede llegar a Ek’ Balam por la carretera Santa Rita y el camino a Ek’ Balaam.
Población de Santa Rita
Hasta el censo del 2020 Santa Rita tenía un total de 531 habitantesdistribuidos en 140 viviendas con una mayoría del 94.5% de población indígena, el 66% habla lengua maya, dato que es contrastante con las localidades anteriores donde alrededor del 85% son maya hablantes. El 91% también habla español.
Al igual que las dos localidades anteriores, las viviendas se comparten entre construcciones tradicionales de bajareque y guano y las otras con materiales modernos de tabique, block y cemento. Más del 90% de las viviendas cuentan con energía eléctrica, el 78% disponen de excusado o sanitario y el 74% tienen drenaje (INEGI, 2020). El 58 % de los habitantes declararon tener acceso a servicios de salud públicos o privados, pero en Santa Rita no hay centro de salud, por lo que deben trasladarse a Temozón o Valladolid.
En Santa Rita el 11% de la población es analfabeta, el 5% no cursó ningún grado escolar, el 14% terminó la primaria, el 23% acabó la secundaria y solo el 8% continuó con la escuela media y superior. En la localidad hay una escuela preescolar, una primaria y una telesecundaria; para quienes desean continuar con su formación necesitan trasladarse a Temozón, Valladolid o Tizimín.
En cuanto a creencias religiosas, el 83% de los habitantes son católicos, el 10.7% pertenecen a un grupo protestante/cristiano evangélico y el 4.8% declararon no tener alguna adscripción religiosa.
Al igual que las dos localidades anteriores, las viviendas se comparten entre construcciones tradicionales de bajareque y guano y las otras con materiales modernos de tabique, block y cemento. Más del 90% de las viviendas cuentan con energía eléctrica, el 78% disponen de excusado o sanitario y el 74% tienen drenaje (INEGI, 2020). El 58 % de los habitantes declararon tener acceso a servicios de salud públicos o privados, pero en Santa Rita no hay centro de salud, por lo que deben trasladarse a Temozón o Valladolid.
En Santa Rita el 11% de la población es analfabeta, el 5% no cursó ningún grado escolar, el 14% terminó la primaria, el 23% acabó la secundaria y solo el 8% continuó con la escuela media y superior. En la localidad hay una escuela preescolar, una primaria y una telesecundaria; para quienes desean continuar con su formación necesitan trasladarse a Temozón, Valladolid o Tizimín.
En cuanto a creencias religiosas, el 83% de los habitantes son católicos, el 10.7% pertenecen a un grupo protestante/cristiano evangélico y el 4.8% declararon no tener alguna adscripción religiosa.
Crecimiento poblacional de Santa Rita
Santa Rita tiene un comportamiento de crecimiento de población igual a las otras dos localidades en cuestión de porcentaje, al ir disminuyendo del 35% en los años 1990-2000, hasta el 15% para el 2020, e igual a Ek’ Balam en el aspecto de haber tenido su mayor crecimiento en la década de los 90s.
Territorio de Santa Rita
La ubicación de la localidad de Santa Rita corresponde a las coordenadas geográficas 88°08’45.431” W y 20°51’40.660” N. A 20 metros sobre el nivel del mar, se encuentra a 23km de Valladolid tomando la carretera hacia Tizimín y después el entronque carretero Valladolid. Tiene una extensión territorial de poco menos de 3km perimetrales y 0.33km2, la mayoría destinados a espacios de vivienda y públicos. La información que se consultó en referencia al devenir histórico de la localidad de Santa Rita es lo plasmado en el Diario Oficial de la Federación el 13 de enero de 1943 que relata el proceso para otorgar el ejido, se menciona ya la existencia de la localidad y que los pobladores carecían de terrenos para sembrar, por lo cual en 1935 realizan la petición de tierras al Gobernador del Estado de Yucatán.
En 1939 se realizó un censo en el que se determinó que había 123 habitantes, 20 jefes de familia y 35 personas capacitadas para trabajar la tierra, la Comisión Agraria Mixta realizó el dictamen y en febrero del siguiente año se dio la respuesta provisional por parte del Gobernador del estado para otorgar 922 hectáreas de las cuales 912 serían para repartir en 37 unidades normales para siembra y una escolar, más las otras 10 para uso urbano, dicha medida se ratificó por el Presidente de la Republica el 24 de julio de ese mismo año (Organo del gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, 1943).
Para 1980 recibieron una ampliación de 317 hectáreas, según los datos del Registro Agrario Nacional y el Padrón e Historial de Núcleos Agrarios (PHINA, s.f.). Al igual que Hunukú, el ejido está conformado por 3 polígonos que dan un área total de 1236 hectáreas, es decir 12.36 Km2 y cerca de 16 hectáreas para el asentamiento humano (PHINA, s.f.).
En 1939 se realizó un censo en el que se determinó que había 123 habitantes, 20 jefes de familia y 35 personas capacitadas para trabajar la tierra, la Comisión Agraria Mixta realizó el dictamen y en febrero del siguiente año se dio la respuesta provisional por parte del Gobernador del estado para otorgar 922 hectáreas de las cuales 912 serían para repartir en 37 unidades normales para siembra y una escolar, más las otras 10 para uso urbano, dicha medida se ratificó por el Presidente de la Republica el 24 de julio de ese mismo año (Organo del gobierno de los Estados Unidos Mexicanos, 1943).
Para 1980 recibieron una ampliación de 317 hectáreas, según los datos del Registro Agrario Nacional y el Padrón e Historial de Núcleos Agrarios (PHINA, s.f.). Al igual que Hunukú, el ejido está conformado por 3 polígonos que dan un área total de 1236 hectáreas, es decir 12.36 Km2 y cerca de 16 hectáreas para el asentamiento humano (PHINA, s.f.).