Fundada originalmente en 1716 en el este de Texas, la Misión de San Juan fue trasladada en 1731 a su ubicación actual. En 1756, se completaron la iglesia de piedra, un convento y un granero. Se comenzó a construir una iglesia más grande, pero se abandonó cuando estaba a medio terminar, como resultado de la disminución de la población.
Este entorno rural sereno parece silenciar las voces del pasado. Sin embargo, si se detiene, puede sentir esas voces resonando en las paredes de piedra caliza. Cualquier día, es común escuchar a los habitantes de la comunidad aún activa de San Juan. Siguen visitando los terrenos de la misión, disfrutando de los elementos naturales y espirituales de su misión vecinal.