Entre los siglos XVI y XVII, el Real de Minas de Nuestra Señora de la Concepción de Pinos fue una escala obligada para todos aquellos que transitaban desde las minas de Zacatecas hasta el Consulado de la Nueva España en la actual ciudad de México, así como para todos aquellos que viajaban a los poblados de San Felipe y San Miguel El Grande.
Pueblo de Pinos
De acuerdo con el cronista franciscano Antonio Tello El Real de Minas de Pinos fue fundado en 1581. Los primeros europeos en visitar el área fueron buscadores de minas y religiosos que empezaron a explorarla desde mediados del siglo XVI. Desde el principio la zona fue reclamada tanto por la Nueva Galicia como por Nueva España. Para 1621 las minas eran prósperas y la mayoría de los metales se extraían de la Sierra de Pinos y del Peñón Blanco; este último, un importante accidente geográfico y formación granítica visible a gran distancia. Este auge minero hizo que el Real de Minas de Pinos, por sobre los demás asentamientos, se consolidara y quedara como cabecera parroquial. Entre las edificaciones virreinales de Pinos destaca la parroquia de San Matías, construida entre 1682 y 1697. En el año de 1795 se comenzó a ampliar el templo para hacerlo de tres naves, aunque esta obra quedó inconclusa. En una de las paredes laterales se encuentra representados un águila bicéfala, el león coronado y un obispo, símbolos de la monarquía dual hispánica. El interior es de una nave techada con bóvedas de arista, crucero y cúpula de tambor octagonal. Se conservan en el templo algunas obras pictóricas de interés como los es una Trinidad firmada por Miguel Cabrera.
Frente a la plaza puede apreciarse un portal donde se establecían los mercaderes. En uno de sus costados se encuentran los restos del templo de la Santa Veracruz, cuya cofradía estaba destinada a llevar a cabo los entierros de los habitantes del Real.
En lo que respecta al convento de San Francisco se sabe que se fundó en 1591. La constitución del templo actual es de piedra, con una portada sin ornamentar, en la que destaca una ventana rebajada y varios nichos con una torre de un cuerpo. El interior es de bóveda de cañón corrido con arcos fajones. El retablo principal es estípite de cuerpo alto y remate, en él se encuentra una imagen del Cristo negro de Esquipulas, patrono del Camino Real. En las paredes laterales se conservan dos retablos salomónicos del siglo XVII.
Otra edificación virreinal trascendente en Pinos es el templo de la Inmaculada Concepción de Tlaxcala, el cual data de la segunda mitad del siglo XVIII. Este inmueble tiene una portada austera en la que destaca una gran ventana coral octagonal y tres nichos. Esta iglesia cuenta con dos torres, de dos cuerpos cada una. El interior está techado por una bóveda de cañón corrido y conserva un retablo dedicado a la Inmaculada Concepción.