Xochicalco es famoso por dos construcciones: la Pirámide de las Serpientes Emplumadas y el Observatorio. En la Pirámide, los expertos identifican un glifo que representa un eclipse total de Sol, ocurrido el 1 de mayo del año 664 d.C, precisamente a las 7.3739 horas, y que quizá motivó la construcción de la pirámide (e incluso la ciudad). Este glifo se repite en toda la Pirámide, lo que atestigua su importancia. Pero hay otra representación que es clave: muestra a un personaje que jala con la mano derecha una fecha calendárica hacia otra fecha que detiene con la mano izquierda. Aunque no hay acuerdo total sobre el significado de esta representación, los expertos parecen coincidir en que se trata de un ajuste del calendario. Cualquier calendario, incluso hoy, tiene un margen de error debido a los años bisiestos y a pequeñas imprecisiones en la medición del tiempo, que a la larga acarrean un desplazamiento. Ello implica que alguna ceremonia o tarea agrícola importante no se celebre en el día correcto. Nuestro propio calendario tuvo que ser ajustado hace 400 años, porque tenía tal error que la fecha de nacimiento de Jesucristo ya no coincidía con la real.

En el mundo prehispánico el calendario era aún más importante: dictaba la fortuna de la gente a partir del día en que habían nacido; especificaba la fecha en que ciertos rituales debían realizarse para mantener el equilibrio del universo; señalaba el momento más adecuado para sembrar y cosechar, e incluso buenas fechas para casarse o para iniciar una batalla: tenía que ser exacto.

¿Por qué ajustarlo en Xochicalco? Por el Observatorio. Es un túnel o “tiro” vertical excavado en la piedra hacia una “cueva” metros abajo, que permite rastrear la posición del sol y las estrellas. Ilumina totalmente la cueva los días 14 y 15 de mayo y se aprecia, con menor intensidad, del 19 de abril al 16 de agosto de cada año. Este preciso instrumento hacía especial a Xochicalco.

¿Por qué en ese momento? Porque probablemente el eclipse lunar, al ser cíclico, marcaba un día especial: sólo ocurriría en esa fecha. Permitiría corregir el error acumulado. Por eso se interpreta al personaje que jala las fechas como la representación de ese ajuste.

Es algo sorprendente, porque sucedió hace más de 1,300 años. Pero más sorprendente todavía es que en la Pirámide de las Serpientes Emplumadas hay representaciones de personajes de otras regiones, algunas muy distantes, varias en plena competencia (si no es que conflicto directo) con Xochicalco y entre ellas, al grado de que se sitúan en posiciones defensivas (como la cima de los cerros). Si esta interpretación es correcta, su presencia en Xochicalco en ocasión del eclipse muestra que pudieron poner de lado sus diferencias particulares para lograr algo que iba en beneficio de todos: corregir el calendario que controlaba sus vidas.

Por eso Xochicalco es clave: nos recuerda que poner el bien común por encima de las diferencias particulares nos beneficia a todos. La visita responsable y la participación ciudadana para la conservarlo permitirá que sobreviva para recordarnos siempre esa importante idea.