En tiempos virreinales, las ciudades de Campeche y Mérida se comunicaban por medio de una vía para carretas y calesas llamada Camino Real. Con el tiempo, cayó en desuso por la aparición del ferrocarril y las carreteras asfaltadas. Empero, el nombre se ha conservado y da identidad a muchas poblaciones del noroeste campechano. Este museo contiene piezas de varias ciudades mayas del norte de la entidad, en especial una rica colección de figurillas de la isla de Jaina y buen número de esculturas, columnas y estelas de piedra caliza del norte campechano.

La muestra está organizada presentando el área maya en su contexto mesoamericano. Hay un especial interés en la riqueza precolombina del municipio de Hecelchakán. Otros temas expuestos son el hombre maya y sus características específicas; el arte de la elaboración de los textiles prehispánicos; y los símbolos de poder en la sociedad maya antigua. También se exhiben las evidencias del intercambio comercial a gran distancia que practicaban las sociedades de ayer. Por tierra, ríos y costas, se movían obsidiana, basalto, jadeíta, vasijas de otras regiones y figurillas de los litorales tabasqueño y veracruzano.

Otro apartado presenta el relevante papel hegemónico de Jaina en el Clásico Tardío (600-900 d. C.), sus construcciones monumentales y las formas de enterramiento. Ello va ligado con la concepción que los mayas tenían del ámbito sobrenatural, de cómo era regido por entidades específicas y cuáles eran algunos de sus mitos fundacionales.
Otros espacios están dedicados a la vivienda tradicional, heredera de aquellas casas de materiales perecederos que ocuparon las clases humildes de tiempos antiguos, coloniales y modernos. En contraste, Xcalumkín y Xuelén, sitios cercanos a Hecelchakán, conservan arquitectura de mampostería en pie y son importantes por otras expresiones de la civilización maya, tales como las inscripciones jeroglíficas y la pintura mural.

El patio del museo ofrece una variada colección de monolitos procedentes de rescates efectuados en diversas zonas arqueológicas del norte de Campeche como Edzná, Itzimté, Miramar, Xcalumkín, Xchan, Xculoc y la propia Hecelchakán.