Plaza Este
Dentro de la tradición religiosa mesoamericana las plazas jugaron un papel importante, debido a que en ellas podían desarrollarse diversas actividades, entre otras, la congregación de personas durante las celebraciones religiosas. La Plaza Este ocupa un lugar central en la conformación de la última etapa del sitio. La escalinata, localizada en la fachada oeste del Montículo 2, es señal de que en algún momento el templo estuvo relacionado con la plaza, y se infiere que eran parte del mismo conjunto arquitectónico. La relación entre plaza y templo es común en sitios como Ihuatzio y Tzintzuntzan.