Este edificio flanquea la plaza principal en su lado sur. Es de base cuadrada y consta de tres cuerpos (el último totalmente destruido por el despiedre de los terrenos en la época colonial), identificados durante las excavaciones de 2006 y 2007; la que está expuesta es la segunda etapa. Los muros comparten el principio del talud tablero, pero en este caso particular solo es talud y paramento recto. Su fachada principal está en la cara norte del edificio y consiste en una escalinata, con alfardas laterales, que asciende hasta el segundo cuerpo. La parte superior del segundo cuerpo estuvo rematada por un templo de base cuadrada, con un pórtico al frente; éste funcionó durante distintas épocas, siendo el periodo Epiclásico en el que fue mayormente utilizado. Durante las excavaciones se recuperaron abundantes objetos y fragmentos de urnas, esculturas y vasijas con elementos que aluden a una deidad del agua, por lo que es probable que el edificio estuviese dedicado a dicha deidad.
Este edificio se encuentra adosado a otro de mayores dimensiones: La Plataforma Alargada, que ha sido determinado como una construcción del Preclásico Medio. Sobre la cara poniente de dicho edificio se construyó, en el periodo Epiclásico, un edificio de planta cuadrada. Posteriormente, en el Posclásico, se construyó sobre el mismo lado poniente de la Plataforma Alargada un edificio de planta circular que se ha deformado por el paso del tiempo. El edificio B se compone de una escalinata con su fachada principal en el lado poniente, está compuesto de ocho cuerpos y rematado por el desplante de un templo. Posiblemente estuvo dedicado a una deidad del viento.
Se localiza en la segunda terraza al norte del conjunto arquitectónico y al sur del altar olmeca. Tiene forma de "I" latina, su orientación es este-oeste y se encuentra adosado a la fachada norte de la Plataforma Alargada. Es un juego de pelota de cancha cerrada, de grandes dimensiones debido a la importancia del lugar como santuario y a las constantes ceremonias y/o rituales que se llevaban a cabo en Chalcatzingo. Además, gracias a las excavaciones, se sabe que contaba con un sistema de desagüe y que tuvo tres etapas constructivas durante su época de uso.