Durante toda la Colonia, los religiosos de diversas órdenes gustaron de escribir temas religiosos para así dejar plasmado en libros los temas más gustados de su vida. Fray Fernando Valverde, agustino, calificador del santo oficio y visitador de imágenes y librerías, escribió un libré sobre la vida de Jesucristo. Sobre el pasaje de la aparición a María Magdalena después de su resurrección nos dice: "La Madalena, que con el Amor que tenía a su Maestro, avia ido en seguimiento de los Apóstoles al Sepulcro, no se podía sossegar: y assí, aunque vió que Pedro, y Juan, aviendo registrado bien el Sacro Tumulo, se bolvian al Cenaculo, y que las demas Matronas, que siguiendo la huella de los Apostoles avian venido con ella al Monumento se bolvian a Jerusalén, se determinó a quedarse sola en guarda del Sepulcro... Amava con valentía a su Maestro... pero el milagro de su Resurrección, aunque se ajustava con los deseos que tenía de su Soberana Exaltación, excedia grandemente su capacidad... no penetrava lo que deviera ya creer... Vio pues, dos Ángeles... Muger, por qué lloras?... Lloro, porque deste sitio han llevado el Cuerpo de mi Señor... Dicho esto, se apareció en forma visible Jesús a las espaldas de la Magdalena y volviendo el rostro, vio al Señor parado, más no supo quien era el que mirava. Dixole blandamente Jesús: Muger, no me dirás por qué lloras tan de veras?... La Magdalena, imaginando que con quien hablava era Hortelano de aquel jardín, porque en forma tal se le representó Jesús, le dixo, entre sollozos: Señor si tú, como quien tiene a su cargo este Huerto, lo sacaste del Sepulcro, en que lo pusieron, dímelo, que yo lo llevaré a mi casa, donde lo trataré con mas decoro" (1)

(1) Fernando de Valverde, Vida de Jesuchristo..., pp. 435-436.