En el anverso se observa el busto de Carlos III de perfil a la izquierda con leyenda paralela al marco y el nombre de los grabadores en el exergo. En el reverso aparece una embarcación de vela de tres palos sobre el mar con leyenda paralela al marco y en el exergo.
Carlos III, hijo de Felipe V, fue primero nombrado duque de Parma y, con ayuda de los franceses, consiguió apoderarse del Reino de Nápoles. Habiendo quedado vacante el trono de España por muerte de Fernando VI (1759), abandonó sus estados para hacerse cargo de la corona española. Su reinado fue bastante afortunado, y se le deben muchas y útiles reformas urbanísticas, el fomento de la agricultura, de la industria y del comercio, la creación de las academias militares, etc. Expulsó a los jesuitas en 1767 de sus posesiones americanas.