Pieza
Cuenco
Réplica
Recipiente
Cerámica
Modelado y pintado
Los sumerios se asentaron al sur de los ríos Tigris y Éufrates, en el actual Iraq a partir del VI milenio a. C. Allí domesticaron cabras y vacas, y sembraron trigo y cebada con los que elaboraron pan y cerveza. Si bien no se sabe si los sumerios inventaron la rueda, le dieron usos militares, comerciales y agrícolas. En Sumeria se desarrolló un modelo urbano integrado por el templo y el palacio. La nueva organización provocó que la mitad de la población de la región viviera en estas ciudades-estado. Nuevos descubrimientos sugieren que la religión organizada apareció antes que la agricultura: el impulso humano de reunirse para celebrar rituales sagrados llevó a construir grandes templos, mientras la necesidad de alimentar a sus constructores y fieles hizo que se desarrollara la agricultura intensiva. El templo también congregaba a los sacerdotes y la burocracia que administraban la fe y el almacén. El palacio resguardaba al rey, elegido por una asamblea, al consejo de ancianos y una cámara de hombres libres. En los archivos de estos edificios comenzaron a registrarse los mitos ancestrales con uno de los primeros sistemas de escritura de la humanidad; simultáneamente, se realizaron los primeros ejercicios de deducción y clasificación del mundo. Sumeria no se aisló de sus vecinos: conseguía metales de los montes Taurus y Zagros y madera del Levante; además, organizó un comercio tanto marítimo -con barcas de vela- como terrestre -por medio de caravanas.