Pieza
Los soles muertos
Toniná, Chiapas
Piedra
Los soles muertos que ofrendaron su sangre al final de cada era, y de los ciclos de vida y muerte de estos pueblos, están representados en el Mural de las Cuatro Eras, en el cual se observa que existe un dominio alternado en el tiempo del inframundo, de la superficie de la tierra y del cielo, así como el de las deidades de los cuatro rumbos, quienes se reemplazan cíclicamente, siguiendo las estaciones del año. Primero dominan las deidades de la guerra, después los dioses de la agricultura, las deidades del intercambio continúan, y finalmente las de muerte y el tributo, que se quedan con todo, hasta que los tiranos son nuevamente derrotados por el Jaguar de la Guerra, quien inicia nuevamente el ciclo.