La Revolución
Rufino Tamayo
Pintura mural al fresco, 1938
Este mural fue el último del artista oaxaqueño y una de las pocas incursiones de Tamayo en la temática revolucionaria. En él se representa el triunfo de los obreros y los campesinos sobre el orden burgués. La técnica de la pintura al fresco consiste en aplicar pigmentos de origen mineral sobre una capa húmeda de estuco, de manera que al secarse los colores se impregnan en la pared. El movimiento muralista rescató esta técnica de tradición europea y la convirtió en el medio principal de uno de los movimientos artísticos más importantes de la historia del arte del siglo XX. "Revolución" abarca 80 metros cuadrados y presenta una escena de la rebelión de obreros y campesinos contra la burguesía. Está ubicado en la pared inicial derecha y la parte superior de dos arcos del Museo Nacional de las Culturas. El mural es el marco que adorna la entrada al conocimiento que ofrece la Biblioteca Pedro Bosch Gimpera.