El ex convento de San Andrés Apóstol de Epazoyucan es un recinto mixto en el sentido que resguarda patrimonio prehispánico y colonial. En la Sala de los Retablos se exhiben cuatro pinturas de mucha belleza. Destaca la titulada “Adoración de los Reyes” o “Epifanía”. La cédula explica que de acuerdo al Nuevo Testamento, unos sabios guiados por señales en el cielo, buscan el lugar de nacimiento de Jesús, para postrarse ante Él. Los regalos son oro, que significa la estirpe real de Cristo; la mirra, Su calidad humana, porque se untaba en el cuerpo de los fallecidos; y el incienso Su calidad divina, pues el humo y aroma se ofrecía a los dioses. La Epifanía (primera aparición de Jesús ante los hombres), fue un pasaje muy representado en la pintura de la Nueva España. La obra, muy hermosa, presenta un grupo de personajes en las que destaca la Virgen con el Niño como figura central, los Reyes Magos de Oriente, los pastores y los elementos arquitectónicos enmarcan y resaltan al personaje principal. Dice la tradición que Melchor, Gaspar y Baltazar, se llevaban veinte años de edad entre cada uno de ellos; así el mayor era Melchor que tenía 60 años y el menor Baltazar, de veinte años. Este último representaba al continente africano, por eso es negro, aunque en un principio se le representaba como un sabio blanco. Los otros representan a Europa y a Asia. El cuadro no está firmado y data del siglo XVIII.
