Al centro de la composición y sobre una peana que a su vez sostiene una barca con flores, se encuentra la imagen de la Inmaculada Concepción. Viste túnica blanca y manto azul, éste último tiene la particularidad de estar decorado con rosas rojas y orlado con perlas y encaje dorado. La Virgen va coronada y alrededor de ella se observa a los siete arcángeles en el siguiente orden: san Miguel se destaca de los demás por su tamaño, viste como guerrero y lleva su báculo rematado en cruz; san Rafael viste como peregrino, con la esclavina, lleva el báculo con el guaje y con la mano izquierda sostiene el pescado conforme a la narración del libro de Tobías; Baraquiel recoge rosas en un paño blanco, en tanto que Saltiel que suele llevar sus manos juntas en señal de oración, ahora sostiene un incensario, Uriel lleva una espada y Jehudiel sostiene cetro y corona. Por último, san Gabriel, viste de blanco y sostiene una rama de azucenas. (1)
Como remate de la composición, el artista anónimo pintó a la Trinidad antropomorfa, las tres divinas Personas visten de blanco y se identifican por los símbolos que llevan en el pecho: al centro Dios Padre, con el sol; a su derecha Dios Hijo con el cordero y a la izquierda del Padre, el Espíritu Santo con la paloma.
(1) Louis Réau, Iconographi de 1´Arte Chretiene, París, Presses Universitaires de France, 1956, Tomo II, pp. 30-42.