Reloj de bolsillo tipo cebollón, la caja consta de un arillo, vidrio, maquinaria y bisagra, elaborados en plata además de abatible. Sobresale una espiga con argolla. La carátula la forma una laminilla prensada con los números romanos que significan las horas de color negro y con números arábigos los minutos y además de fechador con figuras fitomorfas al centro, con una inscripción "Tompion London". Tiene dos manecillas en metal. En la parte posterior de la maquinaria, lleva una laminilla calada con figuras, fitomorfas y geométricas, que protegen al oscilador. Sobresale la boca llave y el ajustador que regula la velocidad.
Fue explotada en 1675 por Isaac Thuret. Se considera igualmente que el sabio inglés Robert Hooke reivindicó esta invención, realizada en 1658 con la ayuda de Thomas Tompion. Quien quiera que sea el inventor, solo queda que la introducción del balancín espiral representaba un gran paso en la fabricación, no solo en los relojes portátiles, de viaje o despertadores. Se reequipaban relojes más antiguos con el balancín espiral. Hace que la fecha sea más difícil. Paralelamente al perfeccionamiento del mecanismo del minutero.