Pieza
Para la construcción de sus casas, los cantoneses utilizaron materiales disponibles en la región: maderas de pinos u oyameles, así como palmas de yucas e izotes para los muros y techos. Hoy en día sólo se observan los basamentos de roca sobre los cuales fueron construidas. El interior de las casas era utilizado sólo para pernoctar, pues todas las actividades cotidianas como moler granos, preparar la comida, trabajar el ixtle o la piel e, incluso, fabricar herramientas de obsidiana, se efectuaban al aire libre.