La portería o también llamada portal de peregrinos fue el espacio que los religiosos utilizaron para el oficio de la misa. Al acercarse al portal de entrada del convento podemos observar que los muros están decorados con pintura. A éstos se les llama frescos, pues la técnica que se empleaba consistía en aplicar los pigmentos de color en el muro con aplanado de yeso fresco para que éste los absorbiera y perduraran por mucho tiempo. Una de las escenas que se presenta al norte es el Juicio Final. La inclusión de este tema se explica debido a que los misioneros predicaban el temor a Dios, la conversión verdadera y el arrepentimiento sincero ante la posibilidad de que el mundo llegara a su fin, de acuerdo con lo profetizado por el Evangelio de Juan.
Espacio
Portería o portal de peregrinos