Sala / Tema
Türkiye. Crisol de culturas
Una nueva sala sobre una nación que ha sido cuna de grandes civilizaciones se sumará al Museo Nacional de las Culturas del Mundo (MNCM). Para conocer las raíces pluriculturales y la riqueza arqueológica en la península de Anatolia en sus diferentes etapas históricas, la sala Türkiye. Crisol de culturas se inaugura en colaboración con la Agencia Turca de Cooperación y Coordinación (TIKA) y la Embajada de la República de Türkiye en México.
La narrativa se remonta hasta el Neolítico (10,000-5,500 a. de C.) para descubrir algunos de los primeros asentamientos humanos complejos del mundo, por ejemplo, el poblado de Ҫatalhöyük y la estructura megalítica de Göbekli Tepe. Sigue en la Edad del Cobre (5,500-3,000 a. de C.), cuando Anatolia se introdujo en las redes comerciales de Oriente Próximo, lo cual derivó en el surgimiento de sociedades jerarquizadas, según evidencias en urbes como Arslantepe.
La visita continúa en la revisión de las múltiples transformaciones a lo largo de la Edad del Bronce (3,000-1,200 a. de C.): el regreso a la forma de vida agropecuaria y sustentable en la etapa temprana, el aumento de las relaciones culturales y económicas con Asiria en el periodo intermedio, así como el surgimiento y dominio del Imperio hitita en la época tardía; bloque que se acompaña con cerámicas y bronces hallados en Kültepe y Boğazköy, entre otros.
Incursiones de pueblos balcánicos y reinos del Cáucaso definieron la península en la Edad del Hierro (1,000-480 a. de C.), se explica en el siguiente segmento. Con objetos hallados en los sitios de Gordion, Altintepe y Toptepe, se descubren los reinos de Frigia y Lidia en la zona occidental, donde se inventa la moneda; el control de la región oriental por el reino de Urartu, que recibe influencias asirias, y las primeras colonias griegas en la costa del Egeo, con su arte “orientalizante”.
Continúa una etapa de asimilación cultural grecorromana: el periodo helenístico (323-31 a. de C.), con fusión de elementos griegos y autóctonos, como se ejemplifica con esculturas; el Imperio romano (27 a. de C.-395 d. de C), cuando surgen grandes ciudades romanas, como Zeugma y Hatay, de las cuales se muestran algunos mosaicos, y el Imperio bizantino (330-1453), con una profunda religiosidad cristiana e influencias sansánidas, según se ve en piezas decorativas y rituales.
El recorrido finaliza con la turquificación e islamización de Anatolia, tras el surgimiento del sultanato selyúcida (1075-1308), en cuya cultura se sintetizan las raíces persa, siria y medioriental, y durante el Imperio otomano (1299-1922), un poderoso Estado que se extendió por Asia, Europa y África del Norte, cuyo esplendor se debió a su diversidad. Textiles, armaduras, relieves, caligrafías, cerámicas, pinturas y otros objetos utilitarios, decoran esta última sección.
La visita continúa en la revisión de las múltiples transformaciones a lo largo de la Edad del Bronce (3,000-1,200 a. de C.): el regreso a la forma de vida agropecuaria y sustentable en la etapa temprana, el aumento de las relaciones culturales y económicas con Asiria en el periodo intermedio, así como el surgimiento y dominio del Imperio hitita en la época tardía; bloque que se acompaña con cerámicas y bronces hallados en Kültepe y Boğazköy, entre otros.
Incursiones de pueblos balcánicos y reinos del Cáucaso definieron la península en la Edad del Hierro (1,000-480 a. de C.), se explica en el siguiente segmento. Con objetos hallados en los sitios de Gordion, Altintepe y Toptepe, se descubren los reinos de Frigia y Lidia en la zona occidental, donde se inventa la moneda; el control de la región oriental por el reino de Urartu, que recibe influencias asirias, y las primeras colonias griegas en la costa del Egeo, con su arte “orientalizante”.
Continúa una etapa de asimilación cultural grecorromana: el periodo helenístico (323-31 a. de C.), con fusión de elementos griegos y autóctonos, como se ejemplifica con esculturas; el Imperio romano (27 a. de C.-395 d. de C), cuando surgen grandes ciudades romanas, como Zeugma y Hatay, de las cuales se muestran algunos mosaicos, y el Imperio bizantino (330-1453), con una profunda religiosidad cristiana e influencias sansánidas, según se ve en piezas decorativas y rituales.
El recorrido finaliza con la turquificación e islamización de Anatolia, tras el surgimiento del sultanato selyúcida (1075-1308), en cuya cultura se sintetizan las raíces persa, siria y medioriental, y durante el Imperio otomano (1299-1922), un poderoso Estado que se extendió por Asia, Europa y África del Norte, cuyo esplendor se debió a su diversidad. Textiles, armaduras, relieves, caligrafías, cerámicas, pinturas y otros objetos utilitarios, decoran esta última sección.
Muestra de piezas exhibidas en esta sala