Esta cancha es de planta en forma de I mayúscula, con amplias banquetas de superficie inclinada y con aros que definen la mitad transversal. Se jugaba con una gran pelota de hule sólido que era golpeada con las caderas. La cancha del juego representaba el universo y, la pelota, los astros que estaban en constante movimiento. En ella se enfrentaban principios opuestos como el día y la noche, la vida y la muerte, el bien y el mal; simbolizaba una eterna lucha, de ahí la importancia de este juego ritual.
Juego de Pelota Sur