Piece
Vaso tallado en ónix blanco, roca silícea de origen volcánico, muy apreciada por su dureza y color. Integrado a la forma del vaso, se talló la figura de un saurio, quizá una iguana o un lagarto, con las escamas de la piel detalladas. Esta especie de animales se relacionaba en Mesoamérica con la tierra. Documentos escritos en el siglo XVI aluden a vasos manufacturados en este material, de los cuales Pedro Mártir de Anglería aseguró haber enviado dos como obsequio al gobernador de Cuba.