La exposición tuvo como objetivo examinar la cultura visual religiosa en el mundo hispánico del siglo XVII desde la óptica de la fe. Buscó a través de la exhibición de 80 obras artísticas, mostrar cómo el arte religioso cumplió con una función doctrinal a la vez que impactante sobre los creyentes, dejando a la posteridad obras de incalculable valor estético y artístico. La muestra incluyó obras de El Greco, Diego, Velázquez, Francisco de Zurbarán, Alonso Cano, Franciso Ribalta, Bartolomé Esteban Murillo, Juan de Valdes Leal, Juan Correa, Cristobal de Villalpando, entre otros.