Este amplio salón es una de las áreas del Palacio de Cortés que más cambios y modificaciones arquitectónicas ha experimentado a lo largo de su historia, principalmente, con la primera restauración del edificio en el siglo XVIII, de la que queda constancia en un letrero en una de las arcadas sobre las que se eleva el techo abovedado del recinto.

La muestra comienza con un conjunto de implementos técnicos en los ingenios o trapiches azucareros que, tanto en el valle oriental como en el occidental del actual Estado de Morelos, fueron los núcleos productivos de las grandes haciendas cañeras, en las que la explotación de los trabajadores indígenas se incorporó a la de los esclavos negros, casi todos procedentes de las Antillas.

Se presentan retratos, mapas, documentos, uniformes militares, armas, muebles de la época y monedas, en el marco social y económico de las propiedades hacendatarias, la Guerra de Independencia, el Sitio de Cuautla, la independencia de la región, la industria azucarera y las diferencias sociales, resultado de la lucha.