La exposición presentó una selección de ex-votos donde se reflejan los testimonios personales y peticiones de ayuda -de manera religiosa- en los momentos de crisis que afectan la vida cotidiana de habitantes de ciertas comunidades de México, expresando además un rico contenido de simbolismo cultural y cambios sociológicos. La muestra fue la primera exposición en el Reino Unido dedicada a pinturas de ex-votos, los cuales fueron escogidos por la curadora Antonia Bruce después de haber realizado un viaje de investigación en la República Mexicana.