Conquista y colonización. El arte rupestre de la época colonial
Con la conquista y colonización de la región a partir del siglo XVI, la práctica del arte rupestre se transformó y surgió una nueva iconografía vinculada con la religión impuesta a los indígenas de la Nueva España: las cruces, capillas y glosas -generalmente de carácter religioso-, en ocasiones negaron y en otras reforzaron y revitalizaron los antiguos espacios sagrados de los belicosos nómadas chichimecas y Arroyo Seco no escapó a esta situación: en varios de sus soportes encontramos vestigios del quehacer misionero plasmado en la roca.