Destacan las figurillas de cerámica procedentes de la isla de Jaina, que representan sacerdotes, señores, guerreros y jugadores de pelota, cuyos detalles proporcionan valiosa información sobre la vida cotidiana de la sociedad maya. Resguarda además columnas y dinteles procedentes de la zona arqueológica de Xcalumkín, así como una maqueta alusiva al momento en que Gonzalo Guerrero, español sobreviviente de un naufragio, decide en 1519 permanecer con su esposa maya e hijos convirtiéndose en el padre del mestizaje.